Esta es la hora a la que debes irte a dormir para proteger a tu corazón

Dormir lo suficiente es fundamental para rendir a diario y fortalecer la salud. Sin embargo, existen teorías variadas sobre el número de horas de sueño adecuado y sobre cuándo irse a dormir. El mito de las ocho horas fue desterrado por organizaciones especializadas en sueño como la National Sleep Foundation (NSF), la cual indica entre 7 y 8 horas de sueño para los adultos, una cifra que cambia según la edad. Pero, ¿cuál es la hora correcta para irse a dormir?

Cabe señalar que nuestro sueño está regulado por las horas de luz a las que estamos expuestos, por lo que la NSF sitúa el mejor horario para descansar hasta el día siguiente entre las 20:00 H y la medianoche. Se trata de una franja muy amplia, de cuatro horas, pero por suerte una investigación reciente ha conseguido establecer un periodo mucho más acotado y con una razón médica de por medio.

Irse a dormir entre las 22:00 H y 23:00 H está asociado con un menor riesgo de desarrollar en el futuro enfermedades del corazón en comparación con hacerlo más temprano o más tarde. Esta afirmación tan contundente resume el contenido el estudio Bedtime linked with heart health publicado el lunes 8 de noviembre en el European Heart Journal-Digital Health.

La investigación, elaborada por médicos de la Sociedad Europea de Cardiología analizó datos procedentes de más de 80.000 adultos durante seis años. Los resultados desvelaron que aquellos que se van a dormir entre las 23:00 H y la medianoche tienen un 12% más de riesgo de tener enfermedades cardíacas. El porcentaje asciende hasta el 25% para quienes se acuesten después de las 00:00 H, mientras que se sitúa en el 24% para los que se acuesten más temprano, antes de las 22:00 H.

"El cuerpo tiene un reloj interno de 24 horas llamado ritmo circadiano que ayuda a regular las actividades físicas y mentales. Aunque no podemos establecer una causalidad a raíz del estudio, los resultados sí sugieren que horas tempranas o tardías de irse a dormir tienen más probabilidades de alterar el reloj del cuerpo, con consecuencias negativas para la salud cardíaca", explica David Plans, neurocientífico en la Universidad de Exeter (Reino Unido), que participó en el estudio.

Así se llevó a cabo la investigación

Plans y sus compañeros investigadores recurrieron al banco de datos británico UK Biobank, que tiene información médica y de estilo de vida de más de 500.000 voluntarios de entre 37 y 73 años.

Los investigadores se centraron en 88.926 adultos con una edad media de 61 años, los cuales llevaron acelerómetros (dispositivos que registran la actividad física de una persona) durante siete días en sus muñecas. Gracias a los datos recogidos por esta vía se pudo determinar a qué hora se iba a dormir cada persona, así como a qué hora se despertaba.

Durante un periodo de 5,7 años, 3.172 de los voluntarios tuvieron afecciones cardiovasculares como apoplejías, infartos o fallos cardíacos. Estos incidentes ocurrieron con mayor frecuencia en personas que se acostaban más tarde de la medianoche, y con menor frecuencia en aquellas que se acostaban entre las 22:00 H y las 23:00 H.

Incluso cuando se tuvieron en cuenta otros factores como el sexo, género, duración del sueño, hábitos como el tabaco, nivel de masa corporal o nivel de colesterol, dormirse regularmente a medianoche o más tarde se relacionó con el mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.

Este riesgo es más pronunciado en las mujeres que se van a dormir tarde. Por su parte, los hombres que tienen más riesgo son aquellos que se van a dormir antes de las 22:00 H.